Pueden cambiar sus palabras, pero la actitud que lo caracteriza se mantiene inmaculada. "Está para cualquiera de los dos", reconoció Carlos Rubén Darío Ruiz. "Bad Boy" defenderá el jueves el título interino mosca de la Organización Mundial de Boxeo. Su rival en el ring que se montará en la rotonda del pie de cerro es Diego Luis Pichardo, de República Dominicana, pero radicado en el país.
La confianza ganadora de "Bad Boy" está intacta. Se nota que esa es la actitud que lo llevó a tener una foja de 16 victorias, 12 de ellas antes del límite y solo dos caídas. Sin embargo, Ruiz, como en sus combates, sabe cuando hacer la pausa correcta. "Tengo y quiero ganar, pero no será fácil. Va a ser una pelea pareja y vamos a ver quién sabe más", anticipa.
También le adelantó a LG Deportiva qué piensa hacer ante el dominicano. "Pero no digan nada porque sino él ya va a saber", pide. Así que el guiño al campeón desde estas líneas sale y solo anticipamos el trámite genérico que describió. "Puede ser una pelea que dure todos los rounds (serán 10) o no va a durar mucho porque él pega y yo pego, pero tengo mucho oficio", analizó el púgil entrenado por Pedro Ruiz.
"Bad Boy" no se equivoca en su análisis porque, al menos en la foja, le saca seis peleas de ventaja a "La Pantera". Pichardo tiene 12 combates, con nueve triunfos y tres derrotas. Esa experiencia extra combinada con el fervor popular que se espera en el feriado por el Día de la Bandera, es la mezcla que planeó todo el cuerpo de trabajo del púgil para que el título se quede en sus manos. "Voy a defender la bandera en su día. En Yerba Buena, las autoridades municipales me trataron muy bien y sería hermoso que esté todo Tucumán", se emociona el boxeador.
En su discurso se cuela el recuerdo de aquellas peleas en México, las únicas dos que perdió y con fallos dudosos. "Peleé con más de 10.000 personas en contra. Me encantaría tener un apoyo así", explicó Ruiz. A pocos días de su defensa, "Bad Boy" ultima los detalles de su preparación. Este fin de semana lo hará en Raco. Él considera que llega en óptimas condiciones. Aunque dejó en claro que no será tan fácil como en su última victoria en Japón en la que noqueó en sólo 35", tampoco dejará que esta vez la victoria se le escape.